El fusilamiento de Fernando (Escena enviada por Noa, con el nick de Roberto)
Yo no podría elegir la mejor escena porque el mejor momento para mí se contó en varias escenas. Todas las escenas de Fernando Solís en la cuarta temporada son muy significativas, desde el momento en que se preocupa por Alicia y quiere que ella no se implique y pueda pasar página siendo feliz, hasta la noche anterior a ser fusilado que pasa con Mario y le explica sus motivaciones. Es una gran trama final para un gran personaje. Pero si he de elegir, me quedo con las escenas de su fusilamiento, son dos escenas pero creo que se pueden contar como una porque es el fusilamiento. (Capítulo 139 de la cuarta temporada)
La soledad de Fernando, esos momentos previos en los que sabe que va a morir, que le van a matar y está compartiendo espacio con sus asesinos… El personaje muestra una entereza envidiable, no les da la satisfacción de verle vencido, le van a matar sí, pero él sigue teniendo la dignidad que les falta a los asesinos que le fusilarán. Desde el primer momento en que levantan la lona del camión donde le trasladan, que Fernando mira a los lados como esperando ver a alguien, se nota que son escenas muy cuidadas.
Desde el principio vemos que no le han doblegado, que no se deja arrastrar como un corderillo al matadero, se resiste cuando le cogen para llevarle hasta el muro, intenta llevar su propio paso y no el que le marcan los soldados. Fernando pasa sus últimos momentos solo frente a quienes van a matarle, pero sigue sin dejarse vencer; me gusta mucho el detalle cuando el oficial le ofrece el último cigarro que él le contesta “puede quitarme las esposas, que no pienso huir”, creo que es un detalle que concuerda muchísimo con el personaje, en el foro lo llamábamos “Solís en estado puro”, es una marca del personaje, utilizar el sarcasmo y el desafío hasta en los peores momentos. A pesar de estar rodeado de sus enemigos, desde guion nos muestran un momento “a solas” del personaje cuando fuma el cigarro, es el último momento en su vida, mira a los lados, se encoge sobre sí mismo mientras da una calada, mira al cielo… Sigue sin mostrar abatimiento, pero a la vez consigue transmitirnos esa tensión del momento, su último cigarro, sus últimos instantes en vida.
Cuando anuncian que el pelotón va a formar Fernando da una última calada, intensa, agarrándose a la vida, pero sin demasiada pomposidad, mostrándonos su mirada al frente, haciendo que lo que siente el personaje nos llegue a través de su mirada, Tira el cigarro y lo pisa para apagarlo. En ese momento empieza una melodía conocida por los espectadores de Amar, una melodía que acompaña los momentos más intensos de la serie, y es cuando nos muestran los últimos recuerdos de Fernando. Un pequeño repaso del recorrido del personaje en la serie; recuerda a Andrea, a la que hemos visto jugarse la vida para salvarle, recuerda a Belle la noche antes de la misión en la fiesta de los nazis, y tiene tres recuerdos para Alicia: su primera vez, un momento que a ella le dijo que iba a recordar hasta el día de su muerte, un momento divertido haciéndola cosquillas y su primer beso, que es el punto de inflexión de su historia de amor. Después de los buenos momentos, tiene un recuerdo para el momento en que tuvo que matar a Belle, hecho del que se sigue sintiendo culpable, y sus últimas palabras son para ella, personaje que para él significa la muerte. Un momento que se guarda para sí mismo, dice la frase sin mirar a sus asesinos, esa frase queda entre el personaje y nosotros.
Cuando termina el repaso por su vida, sube la cabeza, enfrenta con la mirada y con su gesto al pelotón de fusilamiento, mira al frente, no se deja vencer. Traga saliva una última vez, son sus últimos segundos de vida y no piensa mostrarse vencido, él es un resistente y así morirá. Vemos su mirada, en escena aparece por unos segundos el pelotón de fusilamiento, pero en seguida volvemos a ver su mirada al frente, una última mirada que simboliza muchas últimas miradas de hombres y mujeres reales que pasaron por ese momento tan duro, ser fusilados por sus ideas, por luchar por un país libre y justo. Fernando muere de pie y con los ojos abiertos, pero yo añado con toda la dignidad que un hombre puede tener. Carlos García, que durante la tercera temporada ya había mostrado que es un gran actor muy expresivo, hace que esa última mirada de Fernando sea un momento espectacular. Yo he visto esa escena decenas de veces y cada vez que la veo no puedo evitar sentir un nudo en la garganta al ver la última mirada de Fernando, orgullo, dignidad, libertad, desafío, generosidad, resistencia… Es de los mejores momentos de Fernando porque con una sola mirada genera muchas sensaciones, muchos sentimientos. El actor hizo que su actuación fuese un paso más allá con esa última escena.
Después de mostrarnos su última mirada, anuncian el fuego y le vemos caer abatido por los disparos. Un momento muy logrado porque primero nos lo muestran desde la espalda del personaje, cómo las balas impactan en su cuerpo haciendo que se revuelva hacia atrás, y después nos muestran cómo cae al suelo, muy conseguido también el ruido del cuerpo al caer. Le vemos inconsciente en el suelo, con heridas de bala en su cuerpo pero la expresión del personaje es tranquila es como si en cierta forma Marcelino y Pelayo tuviesen razón cuando hablaron de ello y dijeron que por lo menos ahora le dejarían en paz, porque su espíritu sería libre. Vemos acercarse al oficial para dar el tiro de gracia, también me parece muy conseguido el hecho de que el cuerpo reaccione a la presión de otro disparo, la cabeza de Fernando se mueve por el impacto. El oficial de medicina certifica su muerte dándole unos golpes con el pie. Y el último momento es cuando vemos que dos soldados cogen el cuerpo sin vida de Fernando y lo arrastran sin la menor consideración, imagino que para echarle en una fosa. Vemos un primer plano de su cuerpo cuando le levantan para arrastrarle y en una escena de barrido nos muestran un último plano detalle de sus pies. El luchador que muere con las botas puestas. Ese es el último momento que vemos de Fernando, sus pies mientras arrastran su cuerpo para echarle a la fosa. Un gran personaje luchador al que fusilan por sus ideas que ni en su último momento pierde la dignidad y la fuerza que le caracterizan.
Creo que estas escenas están muy cuidadas, no se recrean con el morbo de fusilar a un personaje, muestran todo con gran simpleza y a la vez gran maestría y expresividad. Todos se compenetraron para que las escenas estuviesen a la altura de uno de los mejores personajes de la serie; desde el guion magistralmente escrito aunque el personaje solo diga dos frases en esas escenas, pasando por el director que tuvo que dirigir esas escenas de una manera brillante para que cada detalle estuviese cuidado, hasta llegar al actor que estuvo brillante en una trama corta que debía poner al personaje en su sitio. Todos dieron el máximo en ese trabajo y creo que en el resultado se nota mucho.
Para mi estas escenas expresan realmente el sentido de la serie, mostrarnos la realidad de una generación que no pudo hablar, que no pudo contarnos su lucha porque la dictadura les acalló con la dureza de las armas: fusilamientos, exilio, años de cárcel, torturas continuas… Hubo miles de hombres y mujeres que, por defender la libertad de la República y enfrentarse a la dictadura, lo pagaron con sus vidas y Amar consiguió poner voz, cara, sentimientos, nombres a esas personas. Los guionistas, directores, actores, técnicos, maquilladores, músicos... Consiguieron crear una historia con unos personajes para hacernos entender a personas alejadas de nuestro tiempo que se jugaron su vida para conseguir nuestra libertad. Amar en tiempos revueltos siempre será especial porque contó la historia de muchos hombres y mujeres que hasta ese momento habían sido olvidados.